No hay amor como el de una madre...

Pero cuando se encuentra frente a una cama de hospital batallando por la vida de su hijo, ese amor maternal aumenta y se fortalece.  Es entonce scuando la fe es probada y la oracióm se convierte ene l arma más poderosa.

En Prisioneros de esperanza Claudia Cedillo de Torres narra cómo experimentó al orar por sus tres hijos una respuesta diferente de parte de Dios para cada uno de ellos.  Un "espera" para el hijo que nació con hemofilia, un "no" para el bebito que falleció y un "sí" para su hija que Dios sanó milagrosamente de un tumor en la cabeza.  Además la autora comparte lo que aprendió de cada una de esas experiencias y cómo esto la ha equipado para ayudar a otras mujeres en situaciones similares.

Perpárate para ser inspirado y animado mientras lees sobre el poder de la oración y los resultados que se obtienen cuando nos entregamos completamente a la voluntad de Dios.